Eliminar tantas micro-vibraciones y tanto micro-arco como sea posible es una de las claves para un mejor sonido.Hemos hablado del cable de corriente enfocándolo, no como el último metro y medio, sino como el primero.
Y hemos tratado el asunto de la importancia de las conexiones eléctricas tratando de exponer la importancia de las mismas, valorando no solo su integridad sino también las vibraciones por las que se puedan ver afectadas.
Me gustaría ahondar en el asunto y exponer las razones del porqué podríamos considerar los power cord como un posible punto débil en la cadena de transmisión del flujo de energía eléctrica a nuestro sistema de audio. Mucho de ello tiene que ver con el hecho de que estamos ante múltiples conexiones en las que hay que tener en cuenta, además de su integridad y firmeza, el hecho de que se realizan entre metales diferentes.
Efectivamente, el cable de alimentación en sí tiene muchos puntos de contacto, compuestos generalmente por una variedad de metales diferentes, lo cual hará que estemos ante puntos críticos al considerar la transmisión de energía eléctrica.
Vayamos por partes y observemos el siguiente diagrama en el cual se puede constatar de que hay múltiples nexos de unión y contactos al considerar un solo cable de corriente, antes de que la energía eléctrica llegue a la fuente de alimentación de los aparatos conectados.
El cable de cobre de la línea eléctrica se conecta al socket schuko de la pared mediante tornillos en el mejor de los casos (1, 12 y 18), aunque en las instalaciones estándar domésticas actuales sabemos que esto se suele realizar con un agarre estilo clamp o abrazadera, para lo cual se retira un trozo del dieléctrico del cable para introducirlo luego en un pequeño orificio del conector con una lengüeta de metal que captura el conductor.
Este escenario no es el más apropiado para garantizar la integridad de la conexión, máxime si tenemos en cuenta que gran parte de las instalaciones modernas se realizan con cable multifilar y no sólido, lo cual acrecienta la debilidad del contacto.
Y para colmo, estas conexiones se realizan entre metales diferentes. El material del receptáculo del cable en los sockets de pared no suele ser de cobre sino que, en el mejor de los casos, es de bronce (aleación de cobre y estaño) o latón (aleación de cobre y zinc).
Esto puede facilitar la aparición de fenómenos de electrolisis, además del óxido. Ya se que no estamos hablando de ambientes marinos pero si se trata de hilar fino......
El cable de la línea se sujeta al socket en la pared, la patilla del schuko se sujeta al socket, el conductor del power cord se sujeta al conector por un lado y por otro al IEC; y lo mismo sucede en la conexión IEC hembra - IEC macho del aparato.
El aparato en cuestión monta uno o varios transformadores que transmiten sus vibraciones al chasis, algo que perjudica la estabilidad de la conexión.
En definitiva, estamos al menos ante 18 contactos entre metales que hay que considerar para los tres conductores de un solo power cord del sistema.
En todos estos casos nos podemos encontrar con metales diferentes contactando entre sí. Además del metal propio de las conexiones hemos de tener en cuenta los metales nobles utilizados en el chapado que evita la corrosión.
El power cord se sujeta en ambos extremos mediante mordazas metálicas en las conexiones hembra que generan una tensión para aprisionar las conexiones macho. Esto supone que puede haber unos puntos de conexión "deficientes" en el flujo de la energía eléctrica ya que estos contactos no están realizados con la ayuda de tornillos.
Tanto en los pines de los conectores macho como en las abrazaderas o mordazas de los conectores hembra hemos de tener en cuenta su tamaño, la superficie de contacto, la fuerza que realizan y el material de que están hechos.
Dando por sentado que utilizamos cables de calidad contrastada, podría resultar ideal que el metal que interviene en las conexiones fuese solo cobre. Pero el cobre se oxida por lo que conviene chaparlo en metal noble.
El haber lidiado con estos factores durante muchos años me ha llevado a cuestionarme muchas cosas:
¿Sujetan con firmeza las patillas del conector macho?
¿Cuál es la densidad y la rigidez de la carcasa del cuerpo portante de las conexiones metálicas? ¿De qué materiales está hecha? ¿Cómo se comporta ante las vibraciones?
¿Cómo se realiza la sujección de los cables con los conectores? ¿De qué metal está hecha la sujección? ¿Cuáles son las interfaces metal-metal que están sucediendo aquí?
¿Estos metales tienen la facultad de crear electrólisis entre ellos o es un contacto inerte? ¿Las conexiones de cable/abrazadera están expuestas al aire y a la oxidación con el tiempo?
Por supuesto que luego está la estructura del power cord.
¿Qué materiales componen los conductores? ¿Qué geometría tienen?
¿Y el dieléctrico?
¿Están apantallados los conductores?
En síntesis, estamos tratando un sistema complejo en el que intervienen diferentes metales, contactos más o menos estables, óxidos, posible electrólisis, vibraciones....y todo ello interactuando entre sí.
Como vemos, estamos barajando multitud de factores que pueden interactuar entre sí de manera compleja. Digamos que se trata de
puntos críticos que conviene controlar en el proceso.
Dando por sentado que utilizamos cables de calidad contrastada, podría resultar ideal que el metal que interviene en las conexiones fuese solo cobre. Pero el cobre se oxida por lo que conviene chaparlo en metal noble.
Hemos de procurar que los conectores que usemos tengan un buen agarre y también que la superficie de contacto sea lo más amplia y estable posible.
Para mantener la mayor estabilidad e integridad en los contactos de las conexiones cable/conector se impone el uso de casquillos terminales grimpados cuando se trata de cobre multifilar.
Aquí podemos ver una forma sencilla de elaborar un cable de red.
Los aprietes de los tornillos en los conectores Furutech disponen de un sistema simple y efectivo para aumentar la superficie de contacto con el cable, lo cual garantiza una mayor integridad de la unión cable/conector.
He podido comprobar como el par de apriete de los tornillos también tiene una influencia, en algunos casos notable, en el resultado sonoro.
Y, por supuesto, minimizar las vibraciones en la conexión para lo cual, además de una buena higiene del cableado (existen multitud de
soportes destinados a este fin) podemos utilizar cinta de teflón en los conectores IEC para evitar el "tambaleo". Si además utilizamos los Furutech NCF Booster..... "miel sobre hojuelas".
Me pregunto cuál es la razón por la que, utilizando los mismos cables, los mejores resultados se suelen obtener emparejando los metales y chapados en los conectores macho y hembra.
Algo tan frecuente como la utilización de conectores con diferentes metales puede favorecer el microarco, sobre todo cuando los contactos de las conexiones no son perfectamente lisos.
Si se está produciendo alguna electrólisis, y siempre puede haber alguna con metales diferentes, se trata de microarcos.
Ese microarco puede depositar minúsculos depósitos de carbono entre los dos materiales adyacentes, lo cual acaba maximizando el efecto, produciendo un arco más robusto. Y el microarco crea ruido que se va a traducir en distorsión sonora.
Todos los circuitos, de audio o no, están conectados. Esto es por lo que es tan importante
limpiar los contactos eléctricos, no solo en el sistema de audio sino también en el resto de lugares de la casa. Porque el ruído es sumativo y acumulativo en cualquier lugar. Los contactos sucios o flojos producen microarco y este produce ruido.
Matizo que la distorsión a la que nos referimos no se escucha per se a través de los altavoces. Se trata de distorsiones inaudibles que resultan en menos información musical escuchada en el altavoz.
Cuanto mayor sea el ruido de fondo del sistema de reproducción, más se corromperán las débiles señales musicales leídas en la grabación y menos apropiadamente se procesará la microinformación musical. Por el contrario, cuanto menos sea el nivel de ruido del sistema de reproducción, más información musical leída en la grabación se procesará apropiadamente y se escuchará a través del altavoz.